Las posturas incorrectas que solemos adoptar durante las largas jornadas de trabajo en las que permanecemos sentados delante del ordenador, pueden provocar graves consecuencias para nuestra espalda. Por ello, conocer cómo sentarse y cómo fortalecer los músculos que soportan todo el peso en esta situación es imprescindible si queremos evitar lesiones mayores. En este post te damos algunos consejos para no sufrir dolor de espalda en el trabajo y las ventajas de mantener una buena condición física para disfrutar de una espalda sana.

El primer paso que tenemos que dar cuando nos duele la espalda y hemos decidido ponerle solución a ello, es aprender a identificar el verdadero origen de esta molestia. Existen dolores de espalda que pueden interpretarse como signos de cansancio, cuando en realidad se trata de una potencial lesión de espalda que puede complicarse. Es en este momento cuando hay que acudir a un profesional de la Actividad Física y la Salud para que nos ayude a conocer la forma y los ejercicios adecuados para prevenir dicha lesión y fortalecer la musculatura. En Sano Center contamos con un equipo de entrenadores personales cualificados y con amplia experiencia, que estudiarán tu caso y configurarán un programa de entrenamiento específico que se ajuste a tus necesidades.

El dolor de espalda es algo que le ocurre a muchas personas y puede afectar a distintos aspectos del día a día. Puede volverse un verdadero problema que no permite disfrutar adecuadamente de las actividades más sencillas. De hecho, es una de las causas más probables de bajas laborales, yéndose a más de 70 días al año para los mayores de 55, incidiendo en mayor medida en las mujeres. Pero tiene solución, solo tienes que tomártelo en serio y seguir estos consejos que te damos a continuación:

5 consejos para no sufrir dolor de espalda en el trabajo

1. Ten en cuenta el tipo de trabajo que desempeñas: es importante que analices cuáles son los movimientos que realizas en el trabajo, cuál es la musculatura implicada, cuál es la parte del cuerpo que utilizas más y de qué manera lo haces o cuál es la postura que sueles mantener.
2. Sigue un plan de entrenamiento específico: después de hacer el análisis de tu actividad laboral y haber comprobado los puntos débiles, tu entrenador personal diseñará un programa de ejercicios para fortalecer la musculatura y zonas dañadas, trabajar la higiene postural…
3. Camina todos los días: estar muchas horas de pie sin moverte o sentado puede generar problemas de circulación en las piernas y un desequilibrio muscular. Por ello, realizar ejercicio cardiovascular te ayudará a mantener una correcta circulación y a equilibrar la musculatura descompensada.
4. Realiza descansos activos: algunas personas culpan a la silla de sus dolores de espalda y están sentadas prácticamente las 8 horas que dura la jornada laboral. El pasar la mayoría del tiempo sentado acorta la musculatura posterior, provocando que esta tire de la pelvis y esta a su vez arrastre a la columna lumbar. En algunas ocasiones, si esta situación se mantiene, pueden producirse alteraciones como protusiones y hernias discales. [Pincha aquí para conocer cómo puedes mejorar tu calidad de vida si tienes una protusión o hernia discal]
5. Elimina el estrés: muchos de los problemas físicos que padecemos en la actualidad se deben al estrés y a los nervios. La presión en el trabajo, el exceso de carga laboral… todos estos factores influyen negativamente en nuestro cuerpo y tensan nuestra musculatura, produciéndonos molestias y posteriores lesiones. Por ello, tienes que respirar, tomarte las cosas con calma y bajar un poco el ritmo. Tu bienestar físico y mental te lo agradecerán.

Tener un espalda sana y fuerte está en tu mano, sólo tienes que seguir las pautas para no sufrir dolor de espalda en el trabajo que hemos indicado y acudir a tu centro Sano más cercano para empezar a fortalecer tu musculatura lo antes posible.

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